En 1995, el Banco Interamericano de Desarrollo bautizó la carretera que une La Paz, capital de Bolivia, con la región de Los Yungas, como el camino más peligroso del mundo. Viendo la siguiente imagen, podéis haceros una idea de porqué se le concedió este título...



Las razones de este dramático historial de accidentes y fallecimientos son múltiples. Evidentemente, la principal es el precipicio lateral que, en algunos tramos, supera los mil metros de caída vertical. Pero, como podéis ver en las fotografías, no es la única: la carretera no está asfaltada, no cuenta con guardarraíles y la anchura es mínima, de sólo 3 metros en muchos tramos. Además, en la zona son habituales la niebla y la lluvia, que disminuyen notablemente la visibilidad y convierten el piso en una resbaladiza pista embarrada. Y por si fuera poco todo lo anterior, en ocasiones, se producen desprendimientos de piedras desde la montaña...

La carretera asciende desde los 3.600 metros de altitud sobre el nivel del mar de La Paz, hasta los 4.300 de la zona denominada "La Cumbre". Desde ahí, se inicia un descenso vertiginoso, en el que se salva un desnivel de casi 3.000 metros en sólo 64 km de recorrido. Al conducir por este camino, los vehículos deben conducir por su izquierda, siendo el único lugar de Bolivia donde ésto ocurre. La razón es que los conductores, en caso de cruce con otro vehículo, puedan ver con mayor facilidad el borde del camino, que en casi todos los tramos del trayecto es un abismo...





Actualización 27 de agosto de 2010: No puedo resistirme a añadir a las anteriores imágenes, las dos siguientes fotografías, sacadas de la entrada que Diego González redactó sobre esta misma carretera en su blog Fronteras. La primera de ellas corresponde a un semáforo humano que regula el paso en un tramo complicado. La segunda no necesita aclaración...


Fuentes: wikipedia, el país, historias del motor, fronteras.