Nuestro Sistema Solar pertenece, como todos sabéis, a una de las innumerables galaxias del Universo. Concretamente nos encontramos en el Brazo de Orión de la Vía Láctea, un brazo espiral menor de la galaxia, cercano a la parte más exterior de la misma. El Sol "viaja" en el interior de una cavidad dentro del espacio interestelar galáctico, la cual es más diáfana y menos densa que el resto del espacio interestelar de la galaxia. La mayoría de las estrellas que vemos en el firmamento están dentro del Brazo de Orión. En el hemisferio sur, siempre que haya condiciones óptimas (invierno, cielo despejado y en zonas sin contaminación lumínica), también se pueden apreciar a simple vista las Nubes de Magallanes (Gran Nube y Pequeña Nube), que son galaxias satélite de la Vía Láctea. En el hemisferio Norte, con iguales condiciones de observación, se verían la galaxia de Andrómeda y la Nebulosa de Orión M42. Estos tres grandes objetos estelares, junto con la propia Vía Láctea, son los únicos que alcanzamos a ver sin necesidad de instrumentos ópticos, aparte de las estrellas, planetas y satélites del sistema solar, naturalmente.
El humano no es capaz de observar ninguna otra galaxia porque su luz es tan tenue que nuestros ojos no tienen la sensibilidad suficiente para poder formar la imagen. Usar un telescopio tampoco ayudaría, ya que las galaxias emiten tan poca luz que sólo una fotografía de larga exposición es capaz de captar suficientes fotones como para revelar su aspecto. Pero si con nuestros ojos alcanzáramos a verlas, nos llevaríamos una gran sorpresa relacionada con su tamaño aparente. Resulta que no todas las galaxias serían un pequeñísimo punto perdido en el infinito. Algunas de las más cercanas se mostrarían en el cielo nocturno con un tamaño superior al de nuestra Luna. La siguiente fotografía quizá sirva para aclarar un poco este galimatías: se trata de un montaje con la imagen de la galaxia M101 (Galaxia del Molinete) junto a nuestro satélite para comparar los tamaños aparentes de ambos. La galaxia es muchísimo más grande, pero también se encuentra muchísimo más lejos, lo que hace que el tamaño aparente sea similar...
Imagen: Microsiervos
El efecto de Andrómeda sería más espectacular aún, ya que su tamaño aparente sería 6 veces el de la Luna:En resumen, y usando lenguaje fotográfico: no es cuestión de zoom, sino de sensibilidad.
Fuentes: Microsiervos y Midiclorianos.
2 comentarios
Sigue así!! Que estoy viendo que ésto, ya no es que haya cogido forma, es que es aplastante e insultantemente constructivo, atractivo e incluso superlativo.
Nada pasivo.
Tíovivo.
A la gente que está leyendo este comentario, decirle que se anime a mandar los suyos, que están hechos unos voyeurs. Y a tí, que no los recibes, que no te desanimes, que ésto mola y que además estás recibiendo visitas de Malasia!!
Que no sean cayos.
Esos malayos.
UN BESOTE!!!!!!
Me abrumas, cualquiera diría que eres mi hermano...
Gracias por el comentario y por lo ánimos...
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